La obra de Victor Rodriguez retrata a una mujer de espaldas, desnuda y con el cabello suelto al interior de una habitación. Del lado izquierdo se observa una jarra de plata y una pequeña pintura rosa.
Rodriguez es un artista autodidacta, que emplea la fotografía como referencia para la creación pictórica de retratos de gran formato que muestran un misterio femenino e íntimo. Su técnica incluye el uso de pistola de aire, lápices regulares y de colores, pinceles, cuchillos, crayones y lijas.