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Obras
Jesús y los niños, S.XX
Nuevo TestamentoMateo 19, 13-15
Marcos 10, 13 -16
© Felipe Nieva / Cortesía Fundación AMMAImágenes
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Entonces trajeron a Jesús algunos niños para que les impusiera las manos y rezara por ellos. Pero los discípulos los recibían muy mal. Jesús les dijo: ‘Dejen a esos niños y no les impidan que vengan a mí: el Reino de los Cielos pertenece a los que son como ellos’. Jesús les impuso las manos y continuó su camino. (Mateo 19, 13-15)
Algunas personas le presentaban los niños para que los tocara, pero los discípulos les reprendían. Jesús, al ver esto, se indignó y les dijo: ‘Dejen que los niños vengan a mí y no se lo impidan, porque el Reino de Dios pertenece a los que son como ellos. En verdad les digo: quien no reciba el Reino de Dios como un niño, no entrará en él’. Jesús tomaba a los niños en brazos e, imponiéndoles las manos, los bendecía. (Marcos 10, 13 -16)
Esta escena representa el pasaje de Jesús con niños, mencionado en los Evangelios Sinópticos (Mateo, Marcos y Lucas), cuando acercan niños a Cristo para que los bendiga, y sus discípulos se oponen; Cristo increpa a sus seguidores para que los dejen pasar, poniendo a las infancias como ejemplo del buen creyente.
Este pasaje bíblico fue muy popular a partir del S. XVI, pues servía de elemento propagandístico contra los anabaptistas, que solo bautizaban adultos. Por otra parte, los artistas encontraron especialmente útil este pasaje para decorar instituciones ligadas con infantes, como orfelinatos o colegios. Posteriormente, esta imagen resultaba ser muy emotiva para los infantes que se preparaban para recibir sus sacramentos; resulta enternecedora la representación que hace Nieva con ese Cristo con niños en su regazo sonriendo a una niña que le regala unas flores mientras un perro juguetea.
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