En la obra de Zéh Palito, adornadas con joyas, frutas exóticas y flores, los personajes de sus cuadros son el centro de atención y se convierten en protagonistas de sus...
En la obra de Zéh Palito, adornadas con joyas, frutas exóticas y flores, los personajes de sus cuadros son el centro de atención y se convierten en protagonistas de sus propias historias. Cada figura está posicionada en una postura de poder que ilustra una identidad propia positiva y rinde homenaje a una rica herencia cultural afrodescendiente, lo cual combinado con el uso de colores brillantes, demuestra confianza, satisfacción y seguridad en sí mismo a través de su mera existencia. A pesar de hacer pinturas bastante coloridas que evocan alegría, exponen aspectos políticos que hablan de trauma y dolor entre grupos minoritarios y propone una utopía donde los humanos y la naturaleza coexisten en armonía.